ASPASIA DE MILETO

Aspasia de Mileto (470-410 a.C), no se conoce mucho acerca de ella y los que han escrito sobre su historia lo hacen para atarcarla y ridiculizarla. Se conoce de ella su matrimonio con Pericles. Fue maestra de retórica , teniendo una gran influencia en la vida cultural y política de Atenas. Se dice de ella que fue también una  mujer bella y de gran inteligencia, despertando la admiración y el respeto en grandes filósofos, artistas e ilustres demócratas y, a su vez, el desprecio y las injurias de otros sectores más conservadores de la sociedad ateniense.

Su vida fue un misterio ya que, no se conoce una fecha certera de su nacimiento y muerte, se toma la citada como posible pero no es con seguridad. Es triste que sólo se conozca de ella los períodos que vivió en matrimonio, primeramente con Pericles y después de la muerte de éste, con Lisicles. Se cree que su padre pudo ser Axico, aunque otras fuentes nos dicen que fue Rhodos, un escultor. Desde joven le gustaba leer a poetas y filósofos como Pitágoras. En su adolescencia, un antiguo arconte ateniense, Sofrón, llegó a Mileto y le habló a ésta de las maravillas de Atenas, su avance con respecto a las demás ciudades y la presencia de la hetairas, mujeres que tenían gran influencia y poder para la época, vivían libremente y podían compartir los mismos derechos culturales y políticos que los hombres. Razón por la que decidió viajar a Atenas, allá por el año 450, donde se cree que pudo formarse en retórica, aunque otros piensan que fue durante su tiempo en Mileto. Por el año 445, conoció a Pericles, líder del partido democrático en ese momento, se enamoraron y contrajeron matrimonio a pesar de no estar permitido casarse con mujeres extranjeras. Se dice que Aspasia encajó en el grupo de amigos de Pericles, tanto que Sócrates frecuentaba su casa y varios de los que la trataron llevaron a sus esposas para que la oyeran.

Hacia el año 440 nació su único hijo con Pericles, llamado Pericles el joven, quien llegó a ser general ateniense y murió ejecutado tras la batalla de las Arginusas en el 406. Sea donde fuere que se formara en retórica, se resalta en todo momento su condición de experta en el arte, tanto en el aspecto logográfico como en el pedagógico, por estas virtudes recibió el reconocimiento de muchos ilustres de la época, incluso se llega a pensar que pudo escribirle algún discurso a Pericles.

Por otro lado, por ser extranjera y mujer libre, los grupos más conservadores la atacaron, llegando a ser influyentes hasta nuestros días, ya que la mayoría de los escritos que hablan de ella lo hacen en un tono despectivo.

Pericles y Aspasia contemplando la estatua de Atenea

Causada por esta aversión hacia ella, se creó una acusación de haber ofendido a los dioses, delito que podría tener pena de muerte, como le ocurrió a Sócrates más tarde. Aspasia tuvo que asistir ante un tribunal para responder a estas acusaciones, en el que Pericles salió en su defensa, hablando durante 3 horas, incluso llegó a llorar logrando la absolución de su esposa.

Retrato de Aspasia

Pericles murió durante una epidemia de peste en el año 429, siendo su pérdida un caos para Atenas debido a que, sus sucesores fueron desastrosos. Tras su muerte Aspasia se casó con un rico comerciante, Lisicles, con el que tuvo un hijo llamado Poristes. Se dice que su segundo esposo era mucho más tosco y grosero que Pericles, éste murió poco después que el primero, en el 427 en la Guerra de Caria.

Muerte de Pericles

Tras la muerte de sus segundo marido, la información que se tiene sobre Aspasia es prácticamente nula. Se retiró de la vida pública y vivió en una casa de campo donde daba lecciones a jóvenes alumnas con el objetivo de transmitir sus conocimientos. La fecha de su muerte se desconoce pero se cree que pudo ser sobre el año 410.

Aspasia ha pasado a la historia como una mujer realmente extraordinaria y luchadora teniendo en cuenta la época en la que vivió. Fueron muchos los ilustres que reconocieron y se impresionaron por su talento, belleza e inteligencia, y eso, es un logro que hay que reconocerle en un mundo hecho para los hombres en aquel momento, como sus enemigos intentaron e intentan hacernos ver hoy.Aun así, no han podido silenciar el talento como profesora de retórica y su vivencia como mujer libre.